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Todo el mundo piensa que un empresario es una persona con una visión tan amplia que le permite conocer de todo, sin temor a equivocarse. Lo más seguro es que dentro de la empresa, efectivamente sea el que más conoce el negocio y justamente esa virtud es lo que le permite liderar a su equipo.
Aunque la “cabeza” de la empresa tiene el manejo y su propia visión de la organización, siempre habrá aspectos a mejorar y es allí cuando necesita de personal experto que le brinde asesoría calificada para definir el rumbo de su negocio o mejorar el foco.
Toda empresa requiere de asesoría empresarial, y solicitar el apoyo de un equipo entrenado para esta tarea, es un plus que todo empresario debe sumar a sus objetivos para obtener beneficios en todos los ámbitos.
Seguro te preguntarás ¿que mejoras trae contratar este tipo de servicio de asesoría empresarial calificada? Y la respuesta es: para recibir apoyo o guía de personal externo capacitado para brindar asesoría de negocios a quienes dirigen una empresa, con el único fin de que alcancen sus objetivos internos y externos. En los internos, se consiguen mejoras en las relaciones empresariales y en lo externo, incrementar los ingresos es la misión principal.
Ver la empresa desde afuera
Que alguien vea tu empresa desde afuera y que al mismo tiempo “juegue” de tu lado, es fundamental para tener éxito, pero seguro te preguntarás ¿por qué?
Generalmente dentro de cada empresa se maneja un exceso de confianza que proviene de la gestión propia de la organización, de conocer sus procesos y el mercado, lo que por supuesto es importante, pero no es lo único.
Nos referimos a que dentro de una empresa hay decenas de procesos que en ocasiones no son vistos dentro de lo macro, pero son importantísimos para el funcionamiento integral de tu negocio. En algunas ocasiones llegan a fallar y nadie se detiene a pensar de dónde proviene la falla, mientras los gerentes o directivos están enfocados en asuntos que consideran como más importantes.
Es allí donde la asesoría calificada viene a hacer su trabajo de servir de soporte al empresario y a su organización, al tratarse de alguien externo que pasa a “escudriñar” cada proceso para detectar las posibles fallas que quizá otros no han hecho por la velocidad con la que se dan las rutinas laborales.
Los asesores empresariales pasan a ser una pieza clave dentro de la empresa, porque vienen a revisar los objetivos de la organización, partiendo del conocimiento de sus líderes y es allí donde se produce una simbiosis que beneficia lo interno y externo, guiando la estrategia adecuada para el logro de las metas con la estrategia precisa.
Función de la asesoría
Contar con asesoría calificada permite que la empresa reciba consejos, recomendaciones y sugerencias desde la objetividad. El empresario puede con toda confianza, permitir la evaluación de los procesos internos de la empresa porque con ello obtendrá mejoras sustanciales.
Otra de las funciones de una consultoría es usar todos sus conocimientos y experiencia para crear propuestas que sean idóneas y efectivas, que resuelvan los problemas detectados, bien sea relacionados con la organización o con su economía.
Traer consultores externos a la empresa es una garantía para contar con datos actualizados y detallados, que permitan al empresario tener más claridad para la toma de decisiones. Las proyecciones son fundamentales para hacerle frente a un viraje de timón, en caso de ser necesario.
El intercambio de información que debe haber entre el empresario y sus consultores es un punto central para el éxito de las propuestas que surjan de este trabajo. El líder con su visión, puede acceder a nuevas perspectivas que de seguro lo harán afinar muchas de sus estrategias.
Detectar las debilidades de la empresa, definitivamente es parte fundamental del trabajo del asesor, así como la presentación de ideas innovadoras para que la empresa se sitúe en la cúspide de su área de negocios.
